Es un ícono representativo del estado, es un tesoro natural que comprende la extensión de cerca 160 kilómetros, es la fuente de riqueza para la vegetación que se presenta, así como para las especies animales que viven en esta región.

El agua que nace y recorre el río es cristalina, sin embargo con la luz del sol en ocasiones se torna color esmeralda y aguamarina, lo que es un hermoso espectáculo que se presenta constantemente, además de todo esto, gracias a su gran extensión es el lugar especial para dar un paseo en caballo, hacer un recorrido en lancha, nadar, hacer una simple caminata, e incluso simplemente admirar su belleza natural permaneciendo en las riberas del río.

Un dato interesante, el río nace en el municipio de Múzquiz exactamente en la sierra Hermosa de Santa Rosa a una altura de unos 2000 metros sobre el nivel del mar, y desemboca en Río Bravo. Con el paso del tiempo ha adquirido diversos nombres, llegó a llamarse Río San Juan, después Río Sabinitos y finalmente como se conoce actualmente Río Sabinas, y se debe a que este espacio prevalecen con mayor frecuencia  los árboles conocidos como sabinos, sin embargo también está rodeado de nogales, sauces, mezquites y huizaches.

Aquí también se puede llevar a cabo el birdwatching, la cual es una actividad no muy común, pero es estupendo para poder apreciar y observar las distintas aves que habitan o bajan al río, ya sea a tomar agua o darse un baño refrescante, entre las aves que aquí se pueden llegar a esta concentración son las garzas, las gaviotas, golondrinas, gorrión, patos, tecolotes, y una infinidad más de especies migratorias que también llegan a verse. Otros animales son los coyotes, conejos, gatos montés, ardillas, zorrillos, entre otros.

Este río es muy abundante y ofrece impresionantes atardeceres, por las mañanas se escuchan los sonidos y cantos de las aves, y sus recorridos son una experiencia que pocos lugares ofrecen.

¡Conoce y disfruta del Río Sabinas!